jueves, 11 de diciembre de 2008

Breve resumen del casamiento civil. Reflexiones.

Lo mejor de ese día fue que vino Fernando, el tío de Milton, desde España, sin avisarnos que iba a llegar ese día. Fue genial la sorpresa de Milton, que casi no podía reaccionar al principio.

Lo peor fue que casi llegamos tarde por culpa de Macri que había cortado varias calles para "arreglarlas" cuando ni siquiera estaban rotas, y nos habíamos tomado un taxi, tuvimos que bajarnos, correr, tomarnos otro, y llegamos justo sobre la hora en que teníamos que llegar. Nos casábamos 11.30 y llegamos exactamente a las 11.30 hs.

Mis reflexiones son sobre el casamiento en civil. Lo cierto es que al ser más íntimo, lo disfruté bastante, y tuve ocasión de emocionarme porque los testigos (Macarena, la hermana de Milton, y Esteban, mi hermano menor) dijeron unas palabras a instancias de la jueza de paz.

Para mí está mal que a los homosexuales se les niegue la posibilidad de tener un régimen ganancial si ellos así lo desean. Después de todo, el fundamento del régimen de bienes ganancial es básicamente el hecho de que ambos cónyuges realizan un esfuerzo compartido, y que así como les corresponden a ambos las cargas económicas, les deben corresponder a ambos los provechos económicos que logren mientras dura el matrimonio.

En cuanto a adoptar, la verdad es que si prueban que están aptos para criar un hijo, les pueden brindar un hogar y amor de padres, no tendría que negárseles adoptar del mismo modo que un matrimonio de hombre y mujer. Aunque hoy en día los solteros pueden adoptar, no sé si en la práctica los tribunales los consideran a la hora de repartir a los nenes. Suena feo, lo de "repartir a los nenes", pero ¿no es eso lo que hacen?

La religión y los fundamentalistas religiosos pueden negarse bajo la premisa de que el matrimonio es sagrado y que sólo Dios une, y que "hombre y mujer los creó", etc. Pero yo no hablo del sacramento del matrimonio. Obviamente que el sacramento cae bajo la esfera de lo moral. Yo no me juzgo apta para señalar a nadie con el dedo y menos a una pareja de homosexuales que tal vez estén más cerca de Dios que yo misma. Cuando digo que los homosexuales deberían poder casarse me refiero al casamiento civil. Tendría que existir protección legal para estas personas. El derecho es, antes que nada, regulador de conductas. No debe anteponer las ideologías a su tarea principal que es regular conductas. Pongamos un ejemplo evidente: matar es malo, para la ideología imperante. Sin embargo, no por eso el derecho deja de regular la conducta "matar". En el código penal establece penas para el que lo haga, y agravantes también. Aunque sea malo, existe, y por ende, debe regularse.

Si la ideología imperante considera malo que los homosexuales contraigan matrimonio, eso no va a hacer que los homosexuales dejen de existir ni dejen de irse a vivir juntos cuando así lo deseen. Si existe, debe regularse. En especial, en este caso, en el que el "perjuicio" a la sociedad es inexistente: los homosexuales, ¿disminuyen los ingresos del estado?, ¿atentan contra la salud pública?, ¿contaminan el medio ambiente?, ¿pervierten la moral de la juventud? No. Tinelli pervierte más a la juventud que los homosexuales, señoras y señores.

Sin regular esta conducta, no se beneficia a la sociedad tampoco, porque ¿tenemos superávit por no regularla?, ¿reducimos el smog?, ¿incentivamos la producción de las pymes?, ¿protegemos a la juventud de la perversión moral? ¡No! Y el regularla, efectivamente, no va a transformarnos a todos en homosexuales. Basta de homofobia, por favor. No soluciona nada.

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